Publicaciones > Entrevistas > David Bodanis
 
     
  " Einstein partió de una creencia religiosa".    
 
 
Entrevista publicada en La Contra de la Vanguardia el 11/03/2002, y realizada por Víctor-M. Amela  
 
 

 

Tengo 45 años. Nací en Chicago, en el seno de una familia judía. He vivido en París y ahora vivo en Londres. Soy físico y matemático, y trabajo en Oxford. Tengo dos hijos, de 8 y 6 años. Creo en una fuerza generadora del universo, como creía Einstein. En el libro "E=mc2" (Planeta) explico el origen y el significado de esa célebre ecuación.

Volver al menú

 
     
 
 
 

- En qué era especial el cerebro de Einstein?

- ¡Entendió la naturaleza del tiempo y del espacio! Y el vínculo entre masa y energía.

- Si él no lo hubiera hecho, ¿cuánto hubiera tardado otro científico en hacerlo?

- Para la ecuación E=mc2, que formuló en el año 1905, habrían pasado quizá diez o veinte años. Para llegar a su teoría general de la relatividad (1915), ¡cien años o más!

- ¿Tanto?

- Sí. ¡A cualquier científico le parecería barato entregar 20 años de vida profesional por formular esa tesis! Demostrar el vínculo entre energía y masa, entre espacio y tiempo...

- ¿Cómo funcionaba la mente de Einstein?

- Tenía una creencia: creía que nuestra inteligencia nos hace ver las cosas separadas, pero que detrás de esa apariencia se oculta la unidad de todo lo creado por Dios.

- ¿Por Dios?

- Einstein era religioso, tenía esa creencia.

- ¿Cómo era el Dios de Einstein?

- Era la fuerza creadora del universo. En lo que no creía Einstein es en todos los "detalles" de las diversas tradiciones religiosas.

- ¡Qué paradoja! Que la ecuación científica por excelencia tenga un origen religioso...

- Sí, esa creencia fue el motor de Einstein. Verá: en su época, la ciencia decía que la masa y la energía eran cosas distintas, y con eso todos estaban contentos... Pero Einstein no: ¡él buscaba la unidad, él quería verla! Y la encontró. Y la describió así: E=mc2.

- La ecuación más famosa de la historia.

- Sí. Un día leí una entrevista a la actriz Cameron Díaz en la que le preguntaban si había algo que desearía conocer, y ella respondía: "¡Entender qué significa realmente E=mc2!". Y me di cuenta de que la ecuación es famosa..., pero que la gente no la entiende.

- A ver: "E" es energía, "m" es masa...

- ... y "c" es la velocidad de la luz. Pero al cuadrado: ¡un número altíííííísimo! E=mc2. O sea: un poquitiiiiiito de masa es igual a muchísima energía. O lo mismo: la energía contiene siempre un poquitiiiiiito de masa.

- Si lo entiendo bien, ¿toda masa es a la vez energía, y toda energía es a la vez masa?

- Sí y sí. La masa es energía muy condensada. La energía es masa muy desplegada.

- Entonces son lo mismo: ¡todo es uno!

-Eso es. El universo es "masaenergía": hubo momentos en que casi toda se manifestó como energía y sólo algo como masa. Luego ha habido más masa (toda la materia de planetas, meteoritos, estrellas, galaxias...), y el resto, energía. Y, seguramente, esa masa volverá casi toda a manifestarse como energía.

- Lo de "todo es uno" lo habían dicho ya antes Buda, algunos místicos...

- Sí, era una creencia. Y Einstein la tenía, pero no se conformaba con creer: él supo demostrarlo. ¡Y con qué elegancia: E=mc2!

- Si esta noche yo quisiera explicarle esta verdad a mi hijo de 7 años..., ¿cómo lo hago?

- Señálele uno de sus lápices de colores y pregúntele: "¿Qué hay dentro?".

- Madera y una mina de color, dirá.

-Bien. A continuación pregúntele qué hay dentro de la madera y de la mina.

- Pues..., pues...

- Dígale que la mina y la madera son masa, y que dentro de esa masa hay átomos... Y ya sabe qué le preguntará enseguida, ¿verdad?

- "¿Y qué hay dentro de los átomos?"

- Dígale: algo oculto.

- Insistirá...

-Pues revéleselo: dentro hay... ¡energía!

- Total, que el lápiz está hecho de... energía.

- ¿Esto lo pregunta el niño o usted?

- Lo pregunto yo por él.

- Sí. En cada uno de los átomos del lápiz hay mucha energía: ¡imagine la cantidad enorme de energía que contiene un lápiz!

- ¿Cuánta?

- Con ella podría destruir toda su ciudad.

- No le diré eso al niño...

- Sí, es triste... Verá: cuando Einstein publicó la ecuación en 1905 nadie sabía cómo diablos liberar toda esa energía contenida en un átomo. Pero con el tiempo eso se logró...

- Y se fabricó la bomba atómica.

- Cuando le explicaron que la bomba había sido lanzada sobre Hiroshima, Einstein exclamó: "Si yo hubiera sabido que iba a pasar esto... ¡jamás hubiese movido un dedo!".

- ¿Se arrepintió?

- Desde 1945 luchó para que cesaran las pruebas atómicas. Murió triste: "El hombre ha llegado muy arriba en la ciencia, pero se ha quedado muy abajo en la ética", decía.

- Y a usted, ¿por qué le atrajo Einstein?

-Mi madre -judía- tenía la foto de su cara pegada en la nevera: para ella era un judío importante. Luego, a los 12 años, fuimos con el colegio a un museo de ciencia donde nos dijeron que Einstein fue el más inteligente. "¿Y qué inventó?", preguntó un niño. El profesor no supo contestar. Y yo deseé entender lo que hizo y poder explicárselo a los demás.

- Y dígame, ¿en qué nos es útil E=mc2?

-De ese principio se deriva la radioterapia contra el cáncer, entendemos cómo calienta el sol, qué es un agujero negro, el big bang, el tiempo y el espacio... Un día, como estudiante, entré en una clase de Subrahmanyan Chandra, un discípulo de Einstein, y pregunté: "¿Qué se enseña aquí?". "Aquí explico cómo el espacio se transforma en tiempo y el tiempo en espacio". ¡Me pareció alucinante!

- ¿Es capaz de explicármelo?

- Una piedra cae en un estanque: la onda que se expande es espacio y tiempo a la vez.

- Buf... ¿Lograremos entender el universo?

-Las normas generales, sí... Pero los detalles son tantos que seguirá impredecible.

-Si Einstein viviera, ¿qué investigaría?

-Seguiría intentando desvelar la oculta unidad entre todo lo visible y lo invisible

 

Volver al inicio

 
     
 

© Copyright 2006 - Barcelona